Hoy se cumplio' un pequeño deseo mio... tocar en el boliche METROPOLIS (ahora GROOVE).
Me recuerdo la primera vez que lo vi, en los años 90. Estaba costruido recreando perfectamente a la escenografia de la pelicula omonima de Fritz Lang.
"Wow!" pensè... "Que vuelo!"
Esta noche, invitados por los Kurz Brudern, pudimos tocar en su escenario.
Fue un hermoso show.
Vielen Dank.
sábado, noviembre 06, 2010
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